A todas las familias les preocupa que sus hijos se puedan iniciar en el mundo de la drogadicción. Las drogas están cada vez más al alcance de cualquiera, y parece que el consumo de algunas sustancias se ha convertido en algo que los jóvenes entienden como normal. Prevenirlo no es tarea fácil. Os presentamos algunos consejos que pueden ser de ayuda:
Conocer la realidad familiar y social en la que viven nuestros hijos.
Aprender a dialogar con ellos.
Promocionar una educación afectiva que potencie la construcción de una identidad autónoma en ellos.
Conocer y poner en práctica estrategias que ayuden a los hijos a desarrollar una imagen. positiva de sí mismos y a aumentar el autocontrol, la autoconfianza y la autoestima.
Aprender técnicas de capacitación del individuo para que sea tolerante ante las frustraciones.
Adquirir conocimientos sobre habilidades sociales y la toma de decisiones, a la vez que se ponen en práctica técnicas que ayuden a interiorizarlas, de manera que lleguen a formar parte de las relaciones habituales con los demás.
Aprender habilidades que nos permiten educar a los hijos de modo que sean capaces de tomar sus propias decisiones, siendo críticos y sabiendo resistir a la presión social que reciben desde el exterior.
Clarificar y comprender los principales valores culturales que son la base de la convivencia.
Ayudar a los hijos a establecer un sistema de valores que favorezca la formación de una identidad autónoma y responsable.